El discurso ha terminado. Ya todo ha sido dicho. El resumen es este: Honra a Dios y cumple sus mandamientos, porque eso es el todo de la vida y felicidad del hombre. Dios habrá de pedirnos cuentas de todos nuestros actos, sean buenos o malos, y aunque los hayamos hecho en secreto.
Eclesiastés 12:13-14
Muchas personas están constantemente preparándose para la vida, eso esta muy bien, cuanto más preparados estemos, nos irá mucho mejor y seremos buenos en muchas áreas, y esto traerá, en muchos casos, el ser excelentes personas, aún y cuando no se es un hijo de Dios, las personas mejor preparadas son propensas a salir adelante, porque sembraron tiempo y esfuerzo en su preparación, y como sabemos, la ley de la siembra y la cosecha puesta por Dios siempre funciona.
Salomón el Rey más sabio que existió, resumió en muchos proverbios consejos para la vida. Cuando el acabó un largo discurso lleno de sabiduría, el con convicción en su corazón lo resumió diciendo: "Honra a Dios y cumple sus mandamientos, porque eso es el todo de la vida y felicidad del hombre."
El Rey también dijo que la sabiduría venia del temor a Dios, del no quererle fallar, de honrarlo, amarlo, y respetarlo por lo que Él es; de éste modo el Rey Salomón fue adquiriendo más y más sabiduría después de pedirla a Dios, así fue como el reinado de Salomón se hizo el más grande de todos en Israel, aún mejor que el de David su padre.
Tenemos que entender que la única manera de alcanzar la felicidad en esta vida es tratando de agradar a Dios, por eso lo mencionó el hombre más sabio de la historia (exceptuando claro, a Jesucristo), y quedó como una frase de máxima sabiduría en la historia de la humanidad, que lamentablemente hoy en día, muchos de nosotros, los hijos de Dios, no logramos comprender en su totalidad la profundidad de éste consejo.
Después, en el versículo catorce, nos menciona que de todos modos, cualquiera que haya sido nuestra elección, tomar éste consejo o no, hayamos decidido seguir a Cristo o negarlo, un día, todas y cada una de las personas que hayamos formado parte de la historia de la humanidad, seremos juzgados por el Único Juez que tiene el derecho y la autoridad absoluta para hacerlo, nuestro Dios todopoderoso habrá de pagarnos conforme a lo que hicimos en TODA NUESTRA VIDA; las obras buenas que hicimos por amarlo a El y por hacer bien a los demás, por habernos esforzado hasta el último aliento por agradarle, tratar de seguir sus mandamientos, los cuales con el tiempo nos hicieron entender que la vida es para disfrutarse verdaderamente, pero que sólo se puede gozar completamente de la vida teniendo una relación con Dios.
Nos podemos preparar todo lo que queramos para la vida, pero, siempre tomando en cuenta que no seremos verdaderamente felices, a menos que honremos a Dios y sigamos sus mandamientos.
No vivas por cosas pasajeras, vive para agradar al Rey de Reyes y Señor de Señores, no importa que es lo que hayas hecho, El te ama, y está ansioso por perdonarte pues le costaste muy caro en la cruz.
Concluyo parafraseando a Salomón:
¡El discurso ha terminado. Ya todo ha sido dicho. El resumen es este: Honra a Dios y cumple sus mandamientos, porque eso es el todo de la vida y felicidad del hombre.!
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