“Estoy muy agradecido con Dios, por sobre todas las cosas, y con todas las personas que estuvieron en mi carrera, que aportaron y que me ayudaron a lograr esto”, le dijo Galván Rey a una radio local que le consultó por su marca.
En la víspera, el argentino que nació hace 36 años en Concepción (Tucumán) y que adquirió la nacionalidad colombiana en 2003, batió el récord de Iván René Valenciano, con 217 goles, al marcar el segundo gol y a la vez el empate de su equipo América, tras pescar con la cabeza un rebote en el área del Junior de Barranquilla.
Galván celebró el gol y el nuevo récord con la tribuna, sus compañeros esta vez no se le abalanzaron encima ni lo detuvieron cuando corrió hasta una de las tribunas del estadio Pascual Guerrero de Cali en donde se levantó la casaca de su club y exhibió el siguiente mensaje: “la gloria y la honra es de Dios”.
Luego, en medio de la euforia de los seguidores del “cuadro escarlata”, como le dicen al América, Galván Rey levantó para que todo el estadio lo viera una camiseta de su club con el número 218 en la espalda. El argentino llegó a Colombia en 1996 fichado por el Once Caldas, tres años después de debutar en su país con el Concepción FC y jugar en las reservas de Boca Juniors.
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